Mucho se ha hablado de Lady Gaga en el último año: su estética, sus canciones, sus extravagancias fuera del escenario... Incluso se le han dedicado capítulos de series americanas como Gossip Girl o Glee. Y es que los expertos destacan de ella su originalidad, su teatralidad y su puesta en escena. Estos días se habla aún más de ella porque ya ha salido a la calle su último videoclip, Alejandro, con una promoción digna de la compañía más importante del mundo. Hasta ahora, lo que he escuchado de esta artista no me disgusta, pero tampoco me parece tan original y menos, tras haber visto, este último videoclip. Aquí os lo dejo (son ocho minutejos, vamos, un corto más que un videoclip) y luego comentamos.
¿Qué os parece? A mi me parece un claro referente a Madonna, lo que resta originalidad a la canción. Para empezar la melodía me recuerda a la Isla Bonita para seguir con la estética: la imagen andrógina, las referencias religiosas, mezcladas con sexualidad y sensualidad, por no hablar de look de la británica, con ese rubio, el look nude y, el sujetador del final, con las metralletas que recuerdan a los conos que Madonna se ponía hace unas décadas. En fin... que parece que en esto de la música está todo inventado, por mucho que nos quieran vender a esta cantante como algo novedoso. Y que conste que no me disgusta, pero tampoco me parece para tanto. Cosas del marketing que sigue estando por encima del verdadero talento.
¿Qué os parece? A mi me parece un claro referente a Madonna, lo que resta originalidad a la canción. Para empezar la melodía me recuerda a la Isla Bonita para seguir con la estética: la imagen andrógina, las referencias religiosas, mezcladas con sexualidad y sensualidad, por no hablar de look de la británica, con ese rubio, el look nude y, el sujetador del final, con las metralletas que recuerdan a los conos que Madonna se ponía hace unas décadas. En fin... que parece que en esto de la música está todo inventado, por mucho que nos quieran vender a esta cantante como algo novedoso. Y que conste que no me disgusta, pero tampoco me parece para tanto. Cosas del marketing que sigue estando por encima del verdadero talento.